viernes, 25 de marzo de 2011

AOIZ. PUENTE MEDIEVAL ROMÁNICO

Estos dias ha sido noticia en la prensa navarra la restauración de este monumento,así como su entorno,lo que ha supuesto resaltar su explendor y convertirlo en un nuevo aliciente al rico mosaico de edificios y otros variados objetos artísticos que retratan claramente el explendor de la villa de Aoiz en el pasado y en el presente.
Este magnífico puente,se situa sobre el rio Irati arteria principal que drena una parte de la región subpirenaica y que atraviesa la villa de NNE a SSO,acompañando a una serie de terrazas fluviales que enlazan hacia el N con glacis de erosión.
Aoiz,se encuentra la margen derecha del rio Irati sobre una de las terrazas citadas,a una altura de 504 metros en su núcleo principal de viviendas.
Hasta este puente, denominado de Auzola o según un documento antiguo "puente Bidelepu",llegaba la madera suelta por el rio deslizándose con ruido ensordecedor y a gran velocidad en las grandes crecidas o "pantanadas". Estas crecidas del rio originadas artificialmente eran el medio de transporte de la madera cortada en el monte Irati.
De esta manera tan original llegaban los árboles de haya,roble,pino y abeto a la factoria "El Irati S.A."situada en el término de Ecay (Longuida), próxima a la villa de Aoiz.
En dicha factoría se disponían aserraderos,destiladoras y fábricas de muebles que empleaban trabajadores de Aoiz y pueblos próximos.Entre ellos a varios hermanos Paternain.Al igual que los de Mendaza "la madera",tiene unas connotaciones importantes en el devenir de nuestras vidas.
Todo el complejo industrial maderero se complementó con la construcción en el año 1906 de un ferrocarril desde Aoiz a Pamplona con una extensión a Sanguesa y que servía de salida a los productos que facturaba esta industria.
Con respecto al puente de Auzola,como podemos comprobar es de esbelta figura , robusta construcción, y se ve aligerado por cuatro arcos semicirculares.Su pavimento dispone de dos planos inclinados que se unen en el vértice central.
Sus pilares han resistido varios siglos de empuje de caudalosas aguas y en la última centuria de los importantes golpes de los maderos que transportaba el rio en las crecidas provocadas que llamábamos "pantanadas".
El recuerdo de salida de la escuela y bajar al puente a contemplar ese espectáculo,todavía forma parte de mis recuerdos de niñez.Serán otros recuerdos de los que trataré en otras comunicaciones.
En esta nueva fotografia, además del puente de Auzola aparecece la iglesia parroquial dedicada a San Miguel Arcangel patrono de la villa.En próximas "crónicas" trataremos sobre ésta y otras cuestiones.

1 comentario:

  1. ¡Olé puente elegante! La "pantanada" que se organizaría con los troncos debía ser impresionante, ya nos contarás tus recuerdos de infancia Josetxu.
    Está claro que la madera está muy presente en el ADN de los Pater como dirían los periodistas de ahora.

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