viernes, 1 de junio de 2012

PRACTICANDO EL WU-WEI DESDE SANTA COLOMA

¡Ah!, se me olvidaba deciros en estas últimas entradas sobre Santa Coloma que si subís a la ermita contemplaréis un paisaje único, con la Berrueza a vuestros pies y divisando todos los pueblos del valle. Merece la pena tomarse unos minutos, descansar de la subida y ver geografía, la sierra de Lóquiz al oeste, Monjardín, Montejurra y Urbasa hacia el norte, Codés y Yoar al sur y para rematar la sierra de Cábrega y el Moncayo al este.

- La ermita de Santa Coloma, templo de sabiduría oriental -
Pero lo que os quiero contar sobre Santa Coloma es lo que me relató un hombre sabio, natural de Mendaza, cuyo nombre no diré, pero que bien podría responder al de Longi-Tse por darle un sabor de gurú oriental. Era un hombre mayor, muy mayor, alto en lo físico y grande en la sabiduría.

Cuando le pregunté por el secreto de su envidiable ancianidad el me refirió que una de las cosas que más le gustaba hacer era subir a la ermita y apoyado en una de sus paredes, quedarse dormisqueando mientras contemplaba el paisaje.

Enseguida comprendí que en realidad lo que Longi-Tse hacía era practicar la “quietud creativa”, el arte del “dejar ser”, el conocido “wu-wei” con el cual se fundía con el entorno y con el paisaje para ser sólo uno. Vamos, que se regalaba unas siestas taoistas que le sentaban de fábula.

Parece que literalmente wu-wei significa, en chino, “no acción”, y se llama así en la filosofía taoísta a la forma más adecuada de enfrentarse a la realidad, la de no actuar. En esto conviene no confundir “no actuar” con “no hacer nada”. En realidad se trata de hacer las cosas de forma natural, sin forzar, dejándose arastrar por el flujo interno de las cosas.

Santa Coloma es un escenario perfecto donde practicar el arte del no hacer, el wu-wei. Dos cómodos bancos nos facilitan la labor, "Pedro" el del valle y "Aurora" el de la montaña. Dicen los que los han probado que según estés sentado en un banco o en otro las sensaciones son diferentes.

- El autor en la ermita de Sta Coloma reposa en el banco de Aurora -
En cualquier caso, Santa Coloma reune las condiciones idóneas para conseguir los tres principios que nos permitirán alcanzar el wu-wei según me contó Longi-Tse:
  • La tranquilidad (el sitio nos facilita conseguir el control físico, emocional y mental de la realidad, lo que nos aboca al sumo relajo necesario para la "desconexión").
  • La ligereza (desde la altura se ve todo más fácil. Desde allí discerniremos lo que es fundamental y lo que es accesorio).
  • La sencillez (Longi era un maestro en gestionar la vida con la menor inversión de tiempo, esfuerzo y energía, lo que los modernos llaman sostenibilidad. - ¿Para qué complicarnos la vida? me decía, ¿para qué plantar aquello que no necesitamos y aparentar lo que no somos? insistía. En Santa Coloma lo tenía todo, no necesitaba nada).
Con el paso de los años y recordando las charlas con Longi-Tse descubrí que sabía más de lo que decía, bastante más de lo que aparentaba y muchísimo más de lo que la gente le atribuía. Aquellas siestas a la sombra de la ermita le permiteron alcanzar el Tao que está dentro de los campos de la Berrueza y seguir su camino. Este era su secreto.

¡Qué grande era Longi-Tse! Grande en todo.

3 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Tienes razón Oscar, hace una temporada que me debato entre la 46 y la 48, la cintura indica que vamos camino de la 50, esta carrera no tiene fin, bueno sí , pero no tengo prisa.

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  2. Josetxo Paternain4 de junio de 2012, 17:35

    Hemos leido con verdadero interés las comunicaciones del profesor José Luis sobre la Berrueza en general, y Santa Coloma en particular. No cabe duda alguna sobre la erudición de nuestro amigo y sus conacimientos sobre el pensamiento oriental, y su relación en este caso, sobre lo que representa la situación de la ermita citada.
    Nos sorprende una vez más el autor de estos trabajos, y su pasión por sus lugares tan queridos de Mendaza.
    Gracias a ellos,conocemos muchas y originales noticias de su añorada tierra, que pese a su lejanía temporal, nos la describe como si todos los dias la estuviera contemplando y gozando de ella.
    Fantástico Jose Luis, todo un ejemplo de cariño y recuerdo.

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