BIENVENIDO MAYO

Me acabo de enterar que ya estamos en mayo, que ya ha transcurrido una tercera parte del año. Pero ¿qué es esto? Parece que los recortes han llegado al mismísimo tiempo de manera que éste pasa más rápido.

De cualquier modo, ¡bienvenido! porque cada nuevo mes que comenzamos es un aval de esperanza, un tiempo para vivir nuevas oportunidades, y además, tratándose de mayo, no cabe duda que será un mes especial.

¿Qué podemos decir del tiempo que va a hacer este mayo? El Calendario Zaragozano "el Firmamento" que fundó en 1840 D. Mariano Castillo y Ocsiero pronostica que "habrá días buenos, en conjunto, los del principio, al establecerse el equilibrio atmosférico reinará un temporal bonancible propio de la estación; después los vientos, girando alborotados del O. y SO., contribuirán a que cambie el temple; terminado el mes, los días serán muy variables, a veces de vientos revueltos otros lluviosos, y otros despejados y muy bonancibles."
Bueno, ya veremos si acierta, tampoco "se moja" demasiado.

La sabiduría popular ha ido recreando alrededor de mayo una serie de tópicos y frases que forman parte de nuestro acerbo cultural. Recordemos algunos:

Febrero loco, marzo airoso y abril lluvioso traen a mayo floreado y hermoso.
Agua de mayo, no cala el sayo.
Mayo caliente y lluvioso, ofrece bienes copiosos.
San Isidro Labrador (15 de mayo) quita el agua y trae el sol.
Por Santa Rita (22 de mayo) el agua da más que quita.
Si hiela por Santa Quitaría (22 de mayo), mal año espera.
Hasta San Urbano (25 de mayo), no está libre de hielos el hortelano.
Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo.

Y ¿cómo ha representado el arte este mes en la historia? Traigo una imagen que corresponde al mes de mayo en el calendario presente en el Breviario de Isabel la Católica, una obra de arte de la iluminación del siglo XV y que reside desde el siglo XIX en Inglaterra, en la British Library y que recuperamos aquí gracias a los casi-originales del editor español M. Moleiro.

Como vemos, aparece en el cielo la imagen de los gemelos dentro de un sol como referente de la constelación del zodiaco representante del periodo del año. El paisaje es típicamente primaveral con los árboles cargados de follaje. La escena representa una excursión en barca, con hombres y mujeres, probablemente enamorados, caminando y conversando junto al río y dirigiéndose a la puerta de una casa en la lejanía.

Un mes, el de mayo, que promete buenas nuevas en el amor. Espero que así sea para todos ¡Amén!