jueves, 22 de septiembre de 2011

LAS FABULAS DE SAMANIEGO (V): EL ZAGAL Y LAS OVEJAS.

Samaniego nació cerca de Mendaza, en Laguardia (Álava). Era de una familia bien para la época, es decir, de ascendencia noble, y se sometió a un "Erasmus" de formación en Francia.  Más tarde cursó en la Universidad de Valladolid dos años de la carrera de leyes, aunque no llegó a terminar sus estudios, parece que le atraían otras cosas sin especificar, vamos que tenía madera de artista.
Un tio abuelo suyo, rico y con poder, había fundado la Sociedad Bascongada de Amigos del País que tenía su sede en Vergara y fue allí donde Samaniego encontró cobijo para su pasar y quehacer literario.


La fábula de hoy es una historia que se repite a menudo. Me trae imágenes de políticos, expertos en economía y la feroz crisis económica.

 
EL ZAGAL Y LAS OVEJAS



Apacentando un Joven su ganado,
gritó desde la cima de un collado:
«¡Favor!, que viene el lobo, labradores».


Éstos, abandonando sus labores,
acuden prontamente,
y hallan que es una chanza solamente.
Vuelve a clamar, y temen la desgracia;
segunda vez los burla. ¡Linda gracia!

Pero ¿qué sucedió la vez tercera?
Que vino en realidad la hambrienta fiera.

Entonces el Zagal se desgañita,
y por más que patea, llora y grita,
no se mueve la gente escarmentada,
y el lobo le devora la manada.

¡Cuántas veces resulta de un engaño,
contra el engañador el mayor daño!

1 comentario:

  1. Parece mentira pero las fábulas de Samaniego, como bien comenta el profesor José Luis, nos presentan situaciones de la vida que se repiten a lo largo de nuestra historia.
    Necesitamos que los dirigentes políticos actuales empleen, aunque sea un poco de su tiempo, en considerar sus enseñanzas.Todo un reto para ellos.

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