lunes, 3 de marzo de 2014

AOIZ. RÍO IRATI. APROVECHAMIENTOS HIDRÁULICOS EN LA INCIPIENTE INDUSTRIA EN LA VILLA. SIGLOS XVIII-XIX.

   El río Irati ha estado siempre relacionado con lo acaecido en la Villa de Aoiz, a lo largo del desarrollo de su existencia. En el Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico de Navarra, en su Edición Facsimil de Pascual Madoz de los años 1845-1850, se recogen numerosa información sobre la relación, río Irati-Villa de Aoiz.
   En la acepción río Irati, entre otras informaciones manifiesta: "el caudal y los saltos de agua que presenta dicho río, la abundancia de combustibles y materiales que ofrecen los bosques del mismo nombre y otros montes inmediatos, la baratura de las subsistencias y de los jornales, y la cercanía de la capital de Pamplona; a donde conduce una buena carretera, con otros elementos no menos favorables, hacen de la Villa de Aoiz, uno de los puntos más a propósito para el establecimiento de fábricas. Entre otras hace referencia, a las fábricas de paños, molinos harineros, batanes, sierras hidráulicas de la Compañía El Irati, y en particular la fabricación de papel, todas ellas ubicadas en la Villa de Aoiz, o en sus aledaños".
Río Irati. Puente antes de su renovación.
Del arco menor alimentación al Molino-Batan y Fabrica de Papel.
   La implantación de los establecimientos artesanales e industriales fue siempre muy secundaria en comparación con las actividades agrícolas y ganaderas. No eran capaces de transformar toda la materia prima que se producía en el reino, como podían ser los cueros, lana, y otros, que se exportaban sin elaborar, ni de evitar la masiva importación de manufacturas de primera calidad que venían de Castilla y Francia.
   Se limitaban, salvo excepciones, a atender las demandas más perentorias de la población rural, principalmente el vestido. Según el censo de Floridablanca (año 1.787), había en Navarra 47.719 labradores, frente a 7.416 fabricantes y artesanos. En Pamplona existía un potente sector artesano, que ocupaba algo más de la tercera de la población. En nuestra Villa por los datos que conocemos, había un importante sector de artesanos organizados en gremios y cofradías.
   En todas las ciudades,villas, cendeas y lugares del reino, las actividades artesanales, se organizaban rígidamente de acuerdo con las Ordenanzas propuestas por los gremios y aprobadas por el Rey, a través de su representante en el Reino.
   En la Villa de Aoiz, las principales actividades giraban en torno al trabajo de confección de textiles, de manipulación de cueros y también a la fabricación de papel. Para realizar muchas de las operaciones de fabricación de estos productos, fue necesario disponer de la energía adecuada. Esta necesidad se solventará con la instalación de instrumentos y equipos en las orillas del río Irati, que proporcionará la energía hidráulica necesaria para solventar los diversos procesos de fabricación.
   Por los conocimientos que nos ha proporcionado el consultar documentos en el Archivo General de Navarra, sobre las actividades industriales en el Reino de Navarra, podemos aseverar que en nuestra Villa de Aoiz, eran importantes la fabricación de textiles por parte de los gremios de tejedores y pelaires, la fabricación de papel, por maestros papeleros y los aprovechamientos de la madera.
Situación del Molino harinero y Batanes.
Edificio e instalaciones rehabilitadas.
   Parte de los trabajos de fabricación se realizaban en las instalaciones de un Molino harinero y Batán, situado a orillas del río Irati, aguas abajo del Puente romano, y en la Fabrica de Papel, que se hallaba, según documentos consultados, en el denominado "Membral de Legarrea".
   Ambas instalaciones recibían una corriente de agua, a través de un ramal del río, que partía de una represa situada en la zona del "Prado", atravesando el ojo del citado puente más próximo a su orilla derecha.
   Con respecto a las instalaciones del Molino harinero y Batanes, podemos señalar, que en estas instalaciones se realizaron dos operaciones totalmente distintas. Por una parte se utilizaba como instalación para molturar granos de cereales y obtener harinas, por la otra se realizaron funciones de batanado de los paños fabricados por el gremio de tejedores y pelaires. Estas instalaciones quedaron abandonadas y dejaron de funcionar, al instalarse en las afueras de la Villa de Aoiz, una importante fábrica de harinas y cesar la actividad la fabricación de paños. Hoy día una parte de las instalaciones de este edificio Molino, se han rehabilitado y convertido en un establecimiento de hostelería.
   La recuperación de las instalaciones del Molino-harinero, tuvo como objetivo limpiar el canal de entrada de agua  y el conjunto hidráulico situado en el subsuelo del Molino. En este espacio estaban las ruedas y engranajes de conversión del pequeño salto de agua en energía para mover una piedra circular de gran diámetro, denominada "volandera", sobre otra similar fija llamada "solera".
   El grano de cereal se vertía por un orificio central y el polvo molido ( harina ), salía por los bordes donde se recogía. En este caso, este molino hidráulico de rodete horizontal, la calidad (grosor ) de la harina se regulaba mediante un "tornillo sin fin", que levantaba o bajaba el eje de la rueda superior para aumentar o disminuir el rozamiento con la rueda superior. como hemos indicado con anterioridad. Todos estos mecanismos se pueden observar en este edificio, que se ha  rehabilitado por iniciativa particular de un grupo de personas de la Villa.
Esquema de Molino harinero
Similar al de la villa de Aoiz
   En cuanto a la utilización de los Batanes instalados en el mismo edificio, no ha quedado ningún vestigio. Por los documentos consultados en el Archivo General de Navarra conocemos detalles de estas instalaciones y las funciones que desarrollaban.
   En el edifico del Molino, anexo a las instalaciones de molienda había instalados dos Batanes, uno en el piso superior y otro en el inferior.
   El Batán es un ingenio mecánico, compuesto por una rueda hidráulica movida por la fuerza de una corriente de agua, en este caso la misma que movía las dos piedras circulares de la molienda, que hacia dar vuelta aun eje horizontal, en el que va colocada, una serie de álabes o tablas de madera. Dichos álabes inciden alternativamente en su movimiento de rotación sobre unas piezas de madera, que enganchan, elevan y dejan caer por su propio peso unos grandes mazos que golpean rítmicamente el paño de lana introducido previamente en una "pila" con mezcla de agua y greda.
   Los Batanes tradicionales se fueron extendiendo por todos los ríos del Reino de Navarra junto con los Molinos harineros, Ferrerías y Molinos-Fábricas de Papel.
   El abatanar los paños consistía en limpiarlos de impurezas que habían ido adquiriendo en los procesos de manufactura, entre los principales podemos destacar : el aceite que se aplicaba a la lana para facilitar su cardado, la saliva con que se untaba durante la hilatura, la suciedad adquirida en la fase de textura en el telar, adherencias de motas de polvo sufridas durante el transporte y manipulación del paño y en último término, restos de la propia grasa natural contenida en el pelo de la oveja.
   Esta limpieza se lograba mediante la aplicación de un tratamiento consistente en revolver bien el paño con sustancias desengrasantes, la greda y el jabón combinadas con agua caliente, mientras era golpeado ritmicamente  por los grandes mazos de madera del Batán. Otra finalidad era la de enfurtir el tejido de los paños, es decir proporcionarle un cuerpo más firme y una resistencia superior. Las sustancias desengrasantes actuaban coma astringentes, que conseguían apretar el entramado de la fibra haciéndolo más tupido y resistente.
Dibujo esquemático de un Batán.
Información del Batán de Villava , se puede visitar en la actualidad.
   De las operaciones que se realizaban en el Batán de Aoiz por parte de los maestros Pelaires en el tratamiento de varios tipos de paños en especial el denominado Roncal, existe una amplia información, que se puede consultar en los protocolos notariales, en los que se recogen contratos de utilización y de reparación de estas instalaciones.
   Otra instalación que tuvo una importancia en la industrialización de la Villa, fue el Molino Fabrica de Papel, que estaba situado como hemos señalado con anterioridad en el paraje denominado "Membral de Legarrea", aguas abajo del Molino-Batán.
   La energía necesaria para su funcionamiento era también hidráulica, utilizando la corriente de agua sobrante de las instalaciones mencionadas anteriormente. Todos los dispositivos y aparatos de la Fábrica de Papel estaban instalados en un enorme edificio, situado asimismo a orillas del río Irati, próximo a la conocida huerta de Reparacea.
   El estudio de la importancia que tuvieron los gremios en el nacimiento de la industria en los siglos XVIII-XIX, e incluso en años anteriores en Aoiz, ha facilitado la existencia de una amplia documentación sobre el funcionamiento de estas instalaciones papeleras. El edifico denominado desde nuestro conocimiento como "La Papelera", y que en tiempos pasados fue un nuevo hito para la incipiente industrialización de Aoiz, es por desgracia hoy día, un montón de ruinas.
   Con el nacimiento de la imprenta moderna del alemán Gutenberg en el siglo XV, y su posterior desarrollo, origina la necesidad de ingentes cantidades de papel que sorprende a una industria artesanal anquilosada en el pasado, que no estaba preparada para dar respuesta a estas necesidades. Por ello a partir del siglo XVI en el Estado y en el siglo XVII en el Reino de Navarra, hay una continua referencia a la escasez y falta de papel de calidad, y por tanto la necesidad de que el Estado y sus diferentes territorios, establezcan una política encaminada a la implantación de nuevos Molinos Papeleros y la mejora de los existentes.
Edificio de " la Papelera "
En la actualidad un montón de ruinas.
   Por otra parte, la técnica de fabricación del papel, permanece prácticamente inalterable hasta el siglo XVIII. Otro inconveniente en la fabricación del papel en España fue, la gran competencia del papel fabricado en Francia e Italia. Aunque debemos suponer que, dada la dificultad del control de la frontera terrestre a través de los Pirineos, el contrabando para evitar los impuestos fue altísimo, lo que se constata por la gran presencia de papel de origen francés en el norte de España, sobre todo en Navarra, que no se refleja en los movimientos aduaneros.
   A pesar de la competencia italiana y francesa, en este período en España se elaboró mucho papel, no solo por fabricantes autóctonos, sino por artífices italianos y franceses, que se trasladaron a España, llamados por la facilidad de comercializar sus productos, y las dificultades económicas de su lugar de origen. Analizando estos años comprobamos, que en la primera mitad del siglo XVII, se inicia una leve recuperación de esta industria, que va creciendo paulatinamente, llegando a su esplendor en los siglos XVIII y XIX.
   Después de lo expuesto, se tiene constancia del fomento de la creación de Molinos y Fabricas de Papel en varias poblaciones de Navarra, y entre ellas, la que se instaló en la Villa de Aoiz a orillas del río Irati.
   De forma resumida daremos algunas ideas generales del proceso de fabricación del papel, que tenía como materia principal los trapos y restos de tejidos de algodón y lino.
   El proceso comenzaba con la clasificación manual de los trapos, según calidades, destinándose cada uno de ellos para obtener distintos tipos de producto final. Tras depositarlos en un "pilón" o "pudridero" añadiendo agua, se les dejaba fermentar durante cinco o seis semanas, hasta que una temperatura que se decía, "queme al meter la mano".
   Tras esta operación, que producía malos olores, los trapos se troceaban a mano y seguidamente se vertían en una "pila" con agua, en la que se machacaban y trituraban hasta reducirlos a una fina pasta o pulpa. Este proceso se mecanizó con los molinos papeleros movidos por energía hidráulica, desmenuzándose los trapos con grandes martillos o mazas de madera, proceso similar al del Batán. Se empleaban mazos de diversos tipos para deshilachar, refinar y homogeneizar. La operación de duraba hasta treinta y seis horas, dependiendo del grado de finura de la pulpa que se quería conseguir.
Dibujo esquemático de una Fabrica de Papel
Algunas de las fases de fabricación.
   Terminada la operación anterior la pasta se pasaba a otras "tinas", en donde se diluía con agua, hasta timar aspecto lechoso y se añadían diversos productos, colas y almidón, para darle apresto al papel. Una vez obtenida la pasta, la forma de convertirla en láminas era muy simple, llevando a cabo la operación  a mano, y el papel se obtenía hoja por hoja. El trabajador utilizando las dos manos, introducía en la "pila" un molde rectangular, la denominada "forma" o "bruma" compuesto por un marco de madera con una fina malla de alambres, y lo llenaba de pasta diluida y seguidamente lo sacaba, dejando que el agua escurriera entre los orificios de la malla, quedando retenidas las fibras de los tejidos deshilachados y molidos.
   Seguía el proceso, moviendo el trabajador con presteza el molde en las dos direcciones con lo que las fibras se entrecruzaban y trababan entre si, dando lugar a un material nuevo, la lamina de papel empapada en agua. Luego se volteaba el marco sobre una "bayeta" de tejido.
   Con la repetición de la operación, las láminas se iban apilando unas sobre otras intercalándose entre ellas una capa de fieltro o "bayeta" hasta formar una "posta" (250 o 261 hojas). El conjunto se le sometía a gran presión con una prensa de tornillo, con lo que las láminas de pasta perdían gran parte del agua que aún contenían. A continuación otro operario separaba a mano las hojas y luego las colgaban para el secado.
   Con esta última manipulación y el empaquetado, también parte del proceso, se disponían las denominadas resmas, para sus diversa utilizaciones.
   La documentación examinada sobre el funcionamiento de la Fábrica de Papel de la Villa de Aoiz, engloba los años 1.772 y 1.862, y pertenecen a los despachos de varios notarios que ejercieron su profesión en esta Villa. En este período tiempo, la mayor parte de los contratos de arrendamiento de esta industria se realizaron en estas notarías.
   En próximas comunicaciones trataremos de los personajes que determinaron el funcionamiento de estas instalaciones fabriles : un conjunto de arrendadores, dueños o administradores y otro de arrendados, profesionales y trabajadores de varios oficios.  


No hay comentarios:

Publicar un comentario